Parece que la palabra “resiliencia” se puso de moda. Y no es precisamente a veces bien empleada, muchas personas la ocupan solo porque la han escuchado en algún lugar. Sin embargo el día de hoy te presentaremos que es la resiliencia de manera sencilla y concreta.
La resiliencia es una capacidad que todas las personas podemos llegar a desarrollar por el simple hehco de ser humana, Una persona resiliente suele ser flexible en situaciones límite, sabe como sobreponerse a ellas sin colapsar o entrar en crisis, pero no solo se trata de saber manejar las situaciones, sino de aprender y fortalecerse con las experiencias que a veces nos parecen interminables, incómodas o nos generan emociones que nos causan un malestar.
Muchas veces creemos que pasar por situaciones complejas no sirve de nada, y la realidad es que te ayuda a fortalecer tus recursos psicológicos con los cuales afrontas la vida día a día, en nuestra mente y emociones se generan nuevos modos de ver esas situaciones y por tanto, de reaccionar ante ellas.
En términos concretos se puede utilizar el ejemplo de un pequeño que quiere descubrir el fuego de una vela, acerca la mano y se quema, el pequeño no volverá a tocar el fuego, así mismo ha generado mecanismos distintos de reaccionar ante una situación. Sin embargo, eso sería lo más lógico, en la realidad hay niños muy curiosos que se vuelven a quemar porque no aprendieron de la experiencia. Es por eso que la resiliencia no solo se aprende con la experiencia, muchas veces necesitamos un pequeño empujoncito o acompañamiento para ir aumentando nuestra resiliencia. Con terapia te podemos ayudar. Contáctanos.