Somos la única persona que estará con nosotros/as hasta el día de nuestra muerte, y a pesar de eso, difícilmente nos conocemos a nosotras/os mismas/os.
Nadie nos enseña la importancia que tenemos en nuestra propia vida, somos arquitectas/os de ella, solo nosotras/os sabemos que es lo que construimos, que queremos lograr, a donde vamos y algo super importante, ¿Quiénes somos realmente?
Todo esto que compartimos, tiene que ver con el autoconocimiento, el arte de conocerse a uno mismo de verdad, de forma totalmente honesta y realista.
Es indispensable conocerte a ti mismo/a, ya que ayuda a que tengas un adecuado bienestar emocional, solo el saber que te gusta realmente, como quieres ser tratado/a y que esperas de las personas, así como lo que puedes aportar a alguien más es indispensable para tu desarrollo y crecimiento personal.
Y muchas veces el proceso de conocerse a sí mismo/a, es complicado en sí, doloroso, ya que te enfrentas a tus máscaras, a tus errores, a tus alegrías, tristezas, a lo que te ha hecho daño, al daño que les has hecho a las otras personas, a tu pasado, a lo que realmente quieres para tu futuro, cuando te conoces a ti mimo/a, no hay escapes, dicen que es de valientes ya que no hay vuelta atrás, te servirá para procurarte, perdonarte, tener una mejor clarificación acerca de lo que te gustaría en tu vida.
A veces incluso el conocerse así mismo/a, sirve para tener un nuevo comienzo, ir dejando atrás lo que te daña, lo que te hiere y te fragmenta, ayuda a conocer tus tristezas y enfrentarlas, a saber el sentido de tu vida, a ofrecerte sinceras disculpas, a estar contigo, con tu soledad, que a veces sabemos que es difícil.
Conocerte a ti mismo/a, te empodera, te hace ya no volver a querer bajar el telón, tu vida retoma una importancia increíble, te hace querer ver el sol, un nuevo sol todos los días, a que te valores, a que te des un tiempo contigo, que hagas actividades contigo, que te ames tal como eres.
Sabemos que a veces este proceso de conocimiento no lo podemos hacer solo/a, a veces necesitamos un empujoncito, una mano que nos acompañe, que nos guíe para que si nos caemos en el intento de conocernos, podamos aprender y levantarnos. Contáctanos.